Una iniciativa propone contratar un adulto de 60 años o más por cada 20 empleados; sin embargo, en 17 estados no hay suficientes adultos mayores dispuestos a reincorporarse al mercado laboral.
El congreso local de Baja California presentó ante el Congreso de la Unión una iniciativa en materia de desarrollo social y laboral cuyo objetivo es promover el empleo de los adultos mayores “conforme a su oficio, profesión, o habilidad” para incrementar sus ingresos disponibles y reducir su dependencia de las transferencias monetarias de sus familiares, así como contrarrestar la baja acumulación de activos y la falta de cobertura de seguridad social.
El martes 14 de marzo de 2023, el Senado aprobó la iniciativa con 86 votos a favor y la remitió a la Cámara de Diputados para su análisis y discusión. La iniciativa plantea que el 5% de la plantilla laboral de las empresas deberá estar conformada por personas de 60 años o más; es decir, un adulto mayor por cada veinte empleados.
Al cuarto trimestre de 2022, tan solo 10 estados cumplen con el porcentaje fijado en la iniciativa, destacando Guerrero y la Ciudad de México, cuya incorporación de adultos mayores en empresas con más de 20 empleados es del 8.3% y 8.2%, respectivamente. En el extremo opuesto se encuentran Baja California Sur, Querétaro y Aguascalientes; estados en los que la presencia de adultos mayores en puestos de trabajo representa el 3.2%, 2.6% y 2.5% de su plantilla laboral, respectivamente.
A nivel estatal, al comparar la cantidad de adultos con 60 años o más en busca de trabajo con el número de puestos que la iniciativa establece debieran estar ocupados por este grupo etario, únicamente Morelos, Veracruz, Yucatán, Nayarit y Sonora serían capaces de cubrir la cuota; además de los 10 estados que ya la cubren. El resto de los estados presentarían un déficit al carecer de suficientes adultos mayores para cumplir con la propuesta de modificaciones de los artículos 132 y 133 de la Ley Federal del Trabajo.
NOTA: los valores de la población en busca de trabajo de la ENOE cuentan con un alto grado de variabilidad.
Si bien la iniciativa intenta impulsar una vejez digna, de acuerdo con el Coneval sólo el 8.9% de los adultos mayores sufren vulnerabilidad por ingresos, mientras que el 23.3% padecen vulnerabilidad por carencias sociales, por lo que, también es necesario fomentar el acceso a los servicios básicos para aumentar su calidad de vida. Asimismo, ante la prevalencia de adultos mayores con impedimentos para reinsertarse al mercado laboral, es prudente explorar mecanismos alternos que les proporcionen protección social.
