La confianza empresarial alcanza su valor más bajo en 22 meses, siendo el sector comercial el más perjudicado, al presentar una disminución anual del 26.7%, seguido del sector de la construcción, que cayó en un 18.9% anual.

El Indicador de Confianza Empresarial (ICE) mide la percepción mensual de los empresarios respecto al clima de negocios del país, presente y futuro, para analizar su disposición a realizar inversiones en los sectores de la construcción, las manufacturas y el comercio en México. El indicador está construido considerando las recomendaciones de organismos internacionales y utiliza información del sistema nacional de clasificación de las actividades productivas para separar los sectores analizados, por lo que cuenta con un amplio rigor técnico e intenta adecuarse a la realidad mexicana.

Para diciembre de 2022, el ICE agregado; es decir, aquel que agrupa la confianza en los tres sectores, alcanzó su valor más bajo desde febrero del 2021 al obtener un valor de 45 y mostrar una disminución mensual del 3.0% y una anual del 19.2%. Dado que el valor del indicador oscila entre el cero y el cien, el cincuenta es considerado, por consenso, un umbral que separa el optimismo del pesimismo.

Si bien en México la evolución de la percepción sobre el momento adecuado para invertir tiende a localizarse en el segmento pesimista, en los últimos cuatro años se han observado dos disminuciones importantes; la primera en 2020 y la segunda en 2022.

En 2020 la pandemia de la COVID-19 generó disrupciones en las cadenas de suministro a nivel mundial y el confinamiento obligatorio redujo el consumo de bienes y servicios adquiridos de manera presencial. El efecto resultó en una caída inmediata de la percepción para invertir en los sectores de la construcción, la manufactura y el comercio; sin embargo, la recuperación tuvo inicio en junio del 2020 y se prolongó durante catorce meses para los tres sectores. Por otro lado, en 2022 la percepción de ser un buen momento para invertir en los tres sectores mostró una segunda contracción. A noviembre del 2022, el sector de la construcción hiló once meses a la baja, mientras que el sector manufacturero y el sector comercial acumularon 6 meses a la baja.

En diciembre de 2022, el comercio, la construcción y la manufactura presentaron una disminución mensual en la confianza empresarial del 5.3%, 3.9% y 1.9%, respectivamente. La caída en la confianza en el sector de la construcción está relacionada con el inicio del conflicto entre Rusia y Ucrania que generó presiones en las cadenas de suministros de los metales y la madera, materiales que fungen como insumos para la edificación de obras; la pérdida de poder adquisitivo de las personas, debido a las altas tasas de inflación, que desalentó la demanda por bienes inmuebles y la fuga de capitales que frenó la inversión en el sector. 

En el caso del sector manufacturero y el sector comercial, su tendencia a la baja inició en junio del 2022 al intensificarse el riesgo de una posible recesión en Estados Unidos que impactaría a México a través de las exportaciones y el turismo. Asimismo, los tres sectores enfrentan los efectos de las presiones inflacionarias que aumentan sus costos de producción e impulsan los incrementos consecutivos de las tasas de interés que restringen las condiciones financieras mundiales.

Si bien ambas caídas en la confianza empresarial frenan el desempeño económico del país al impedir el desarrollo de los sectores productivos de la economía mexicana, la principal diferencia de la caída actual con la atribuida a la pandemia es que la tendencia a la baja se ha prolongado, lo cual indica que en los tres sectores predomina la incertidumbre sobre la evolución de las variables macroeconómicas como lo son del crecimiento económico, la inflación y las tasas de interés, que cuestionan la viabilidad de un panorama económico que propicie un buen desempeño de la economía mexicana en los próximos meses.