La OCDE estima que el crecimiento anual para México será del 2.5% para el cierre de 2022, del 1.6% para 2023 y del 2.1% para 2024.
En el reporte de noviembre de Perspectivas Económicas publicado por la OCDE se estima que, para el cierre del 2022, la economía mundial tendrá un crecimiento del 3.1%, mientras que para 2023 será del 2.2% y para 2024 será del 2.7%.
En comparación con otros países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), México será el decimosexto país con mayor crecimiento para el cierre de 2022. No obstante, para 2023 y 2024 se estima que será el octavo y sexto país con mayor crecimiento respectivamente, esto debido a la baja actividad económica que presentarán países como Estados Unidos, Alemania y Reino Unido en los próximos dos años; ya que, junto con Chile y Suecia se estima que serán los únicos países de la OCDE con una variación negativa en su PIB para 2023.
Ante esto, se espera que las principales economías emergentes de Asia representen cerca de tres cuartas partes del crecimiento del PIB mundial en 2023.
El escenario de desaceleración económica mundial presentado por la OCDE tiene como causas principales la expectativa de una política monetaria más estricta y con ello, tasas de interés reales más altas; además de que los precios de la energía se mantienen altos y continua el bajo crecimiento en los ingresos reales de los hogares a causa de las persistentes presiones inflacionarias.
Dichas presiones se han intensificado, en gran parte debido a la guerra entre Rusia y Ucrania, ya que ha provocado un incremento en el precio de las materias primas energéticas y alimentarias. A su vez, el alto precio de la energía ha desencadenado mayores precios en el resto de los bienes de consumo de la economía debido a su importancia dentro de los sistemas de logística.
Si bien la inflación permanecerá alta en 2023, se espera que la política monetaria más estricta y la desaceleración del crecimiento ayuden a moderar la inflación para 2024.
En el caso de México, se estima que para el cierre del 2022 la inflación será de 8.0%, es decir 1.4 puntos porcentuales menor que el promedio de la OCDE. Mientras que para 2023 y 2024 se estima una inflación del 5.7% y 3.3% respectivamente, es decir, 0.9 y 1.9 puntos porcentuales por debajo del promedio de la OCDE, respectivamente.
En suma, las medidas requeridas para combatir los altos niveles de inflación atacan directamente los motores del crecimiento económico. A pesar de ello, se espera que en los próximos años las economías comiencen a estabilizarse.