La inflación se desaceleró en el mes de abril por tercer mes consecutivo, motivado principalmente por los productos agrícolas y energéticos. Dicha trayectoria permitiría al Banco de México frenar la política alcista sobre la tasa de interés.

De acuerdo con las últimas cifras publicadas por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) mostró un crecimiento anual del 6.3% en abril, una disminución de 0.6 puntos porcentuales respecto a la inflación observada en el mes de marzo. Con lo anterior, la inflación estaría acumulando su tercer mes consecutivo a la baja.

La inflación subyacente se desaceleró en abril mientras que el índice de precios subyacente registró un incremento de 0.4% mensual y de 7.7% anual.

Los productos agropecuarios y los energéticos fueron los componentes que más contribuyeron para que la inflación general se ubique en tendencia a la baja. La electricidad fue el producto genérico que tuvo la menor incidencia en el INPC, debido a que el programa de tarifas eléctricas de temporada cálida inició su periodo de vigencia durante abril en las ciudades de Mérida, Monterrey, Acapulco, Torreón, Veracruz, Villahermosa, Tampico, Monclova, Chetumal, Iguala, Tepic, San Andrés Tuxtla, Campeche, Tehuantepec, Ciudad Acuña, Cancún, Coatzacoalcos y Tuxtla Gutiérrez.

Los datos de inflación con tendencia a la baja abren la posibilidad a que Banxico frene su ciclo alcista y que el 18 de mayo, en su próxima reunión monetaria, haga un alto en el aumento de la tasa de interés.
La gobernadora de Banxico, Victoria Rodríguez Ceja, dijo el 25 de abril ante el Senado que el banco central evalúa hacer un alto en la tasa de interés en su próxima decisión, debido a que la inflación muestra una tendencia bajista y a la postura monetaria alcanzada desde que se inició el ciclo de alzas del referencial en junio de 2021.