La OCDE prevé que la inflación en México se modere durante 2023 y cierre el año con un nivel del 5.9%. Sin embargo, aun con esta reducción, México seguiría contando con una inflación superior a la inflación objetivo en 2.9 puntos porcentuales.

Acorde a las perspectivas económicas de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), la inflación general en países del G20 continúa con una tendencia decreciente; sin embargo, la inflación subyacente se mantiene en niveles altos por un aumento en el precio de los servicios.

En el caso de México, para marzo de 2023, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) reportó un nivel de inflación anual del 6.85% y acorde a estimaciones de la OCDE, se prevé que, para el cierre del año, sea de 5.9%. Con lo anterior se esperaría que la inflación anual siga una trayectoria decreciente para el resto del año.

En contraste, la OCDE estima que el nivel promedio de inflación para los países del G20 al cierre del 2023 se encuentre en 4.8%, cifra inferior a la expectativa para México en 1.1 puntos porcentuales. No obstante, si se hace un análisis en el que se considere como índice base el año 2018, se observa que la gran mayoría de los países han mostrado una inflación más volátil que la de México. Cabe mencionar que los países de Turquía y Argentina, a pesar de ser miembros del G20, no se incluyen en el análisis debido a que, durante las últimas décadas, han mostrado niveles inflacionarios extraordinarios. Por ejemplo, para el 2022 Turquía registró una inflación anual del 72.3% y Argentina, del 95.0%.

El incremento inflacionario que se observó en los países europeos durante el 2022 fue resultado de las sanciones que impuso Occidente sobre el comercio ruso y, con ello, el aumento en los precios de los energéticos que provenían de este país, ya que los países europeos dependen mucho de estos energéticos.

Para contrarrestar la inflación, los países del G20 cuentan con un nivel de inflación objetivo delimitado por el banco central de cada país. Para mantener el nivel de inflación lo más cercano posible al objetivo, los países cuentan con diversas herramientas monetarias, siendo una de ellas, la tasa de interés.
Al observar la brecha que tienen los países del G20 entre su nivel de inflación esperado para el cierre del 2023 y la inflación objetivo, destaca que únicamente China alcance su objetivo inflacionario (brecha negativa). Por otro lado, se espera que Reino Unido, Italia y Alemania sean los países que cierren el 2023 con la inflación más lejana a su objetivo.

En el caso de México, se han utilizado diversas herramientas monetarias y fiscales para estabilizar los precios y alcanzar el objetivo planteado por el Banco de México (Banxico). En materia monetaria, el banco central ha mantenido una política de alzas en la tasa de interés.

Por su parte, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) implementó el Paquete Contra la Inflación y la Carestía (PACIC) con el propósito de estabilizar el precio de los productos básicos de consumo de la población. Asimismo, la SHCP asignó un estímulo fiscal sobre los combustibles para que la población solo enfrente incrementos equivalentes a la inflación y no aquellos generados por la escasez de energéticos que surgió tras las sanciones económicas impuestas a los energéticos rusos.

A pesar de estos esfuerzos, se espera que para el cierre del 2023 México aún se encuentre a 2.9 puntos porcentuales de la inflación objetivo de Banxico, la cual se encuentra en 3%, pero que permite un rango entre el 2% y 4%. Destaca que la OCDE estima que para el 2024 la inflación anual en México cierre en un 3.4%, lo que se encontraría dentro del rango de inflación aceptado por Banxico.